Prometeo sintió pena por su creación, viéndola tiritar en las noches frías, así que se le ocurrió robar el fuego del carro de Helios con un tallo de hinojo, que arde lentamente. Gracias a él, la humanidad pudo calentarse. Para que Zeus no se enfadase, dijo a los humanos que quemasen ofrendas a los dioses. Sacrificaron un gran toro. Prometeo escondió la carne bajo una capa de huesos, por lo que Zeus escogió los huesos y Prometeo se quedó la carne para si mismo y para los humanos.
Para castigar a Prometeo y a los humanos, Zeus se llevó el fuego.
Hefesto hizo una mujer de arcilla llamada Pandora para Prometeo y le dió la caja de todos los males. Prometeo no quiso a Pandora y se la dio a Epimeteo. Zeus se enfureció y lo castigó encadenándolo al Cáucaso y haciendo que un águila se comiera su hígado cada día.
Hércules liberó a Prometeo 30 años después disparándole una flecha al águila. Pandora abrió un día la caja y liberó todos los males sobre la Tierra, menos la esperanza.

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